Para pedir por la conversión del corazón y para los cambios de vida.
Esta oración básicamente está tomada de Balduino de Ford o de Canterbury que nació en el seno de una familia pobre del Devonshire, Inglaterra. Pudo estudiar en la escuela catedralicia de Exeter, donde recibió el orden sacerdotal. En 1169 ingresó a la abadía de Ford. En 1175 fue elegido abad. En 1181, fue ordenado obispo de Worchester-on-Severn y, en 1184, nombrado arzobispo de Canterbury y primado de Inglaterra. Se adhirió a la Tercera Cruzada y, en 1189, partió con Ricardo Corazón de León a Palestina. Murió con mucho pesar al ver los desastres de la guerra y el mal comportamiento de los cruzados en el año 1190.
Hemos añadido algunas frases basadas en la lectura del libro de Ezequiel en los capítulos 11 y 36
Quita de mí, Señor, este corazón de piedra, quita de mí este corazón endurecido y dame un corazón de carne. Conviértelo Tú que purificas los corazones y amas los corazones puros, toma posesión de mi corazón y habita en él, llénalo con tu presencia, tú que eres superior a lo más grande que hay en mí y que estás más dentro de mí que mi propia intimidad. Rocíame con agua pura y purifícame; de todas las impurezas y de todas las basuras.
Que los querubines desplieguen sus alas y limpien todo lo malo y oscuro que hay mí.
Dame un corazón nuevo, infunde en mí un espíritu nuevo.
Tú que eres el modelo perfecto de la belleza el sello de la santidad, sella mi corazón con la impronta de tu imagen, sella mi corazón, por tu misericordia, tú Dios por quien se consume mi corazón, mi lote perpetuo. Amén.